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Ginecoestética con láser en Almería

La ginecoestética con láser en Almería abarca todos los procedimientos que empleen este sistema de intervención. El procedimiento en sí te resultará rápido y sin mayores complicaciones. De hecho, no suele requerir la aplicación de anestesia ni ningún período de recuperación. El ginecólogo es quien se va a encargar de recomendar las sesiones adecuadas a cada caso.

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Este sistema se aplica porque el láser provoca una estimulación profunda del tejido vaginal, lo que conduce a una completa regeneración. De paso, se mejora el sostén uretro-vesical. Entre sus muchas utilidades, se pueden citar las siguientes.

  • Labioplástia de reducción. Se remodelan y rediseñan los labios menores que se encuentran agrandados o asimétricos debido a la edad, los partos o las cirugías.
  • Laxitud vaginal. Tiene lugar cuando, como consecuencia del parto vaginal, se generan modificaciones en las medidas anatómicas externas e internas del canal vaginal. Con ayuda del aplicador endo-vaginal computarizado del láser, se puede lograr el rejuvenecimiento vaginal. La mucosa vaginal absorbe esta energía, lo que lleva a una contracción vaginal con el consiguiente incremento del tono y mejora de la lubricación.
  • Blanqueamiento anal y vulvar. Conforme van pasando los años, las partes más íntimas se van oscureciendo, especialmente después de que haya tenido lugar el embarazo. Al aplicar el láser, se despigmentan dichas zonas, lo que se traduce en una restauración de los niveles de juventud y armonía corporal.
  • Episiotomía. Se trata de un procedimiento quirúrgico realizado mediante un corte en el introito vaginal. Es confiable hasta el punto de practicarse en torno a un 90 % de las mujeres que han tenido partos vía vaginal. Como la cicatriz de la episiotomía puede producir molestias, se recurre al láser para mitigar o eliminar el dolor en la zona.
  • Erradicación de verrugas y tratamiento de lesiones en la parte genital. Esta técnica se aplica con el objetivo de vaporizar toda clase de lesiones en una sola sesión. Tiene la ventaja añadida de resultar indolora, además de eliminar con un considerable porcentaje de éxito las verrugas, sin dejar cicatrices visibles.
  • Laxitud y atrofia en la superficie vaginal. Aproximadamente, una vez se han cumplido los 30 años, comienzan a tener lugar modificaciones profundas en esta zona del cuerpo. Estos cambios pueden adelantarse con los partos vía vaginal. El láser puede poner solución a estas alteraciones físicas y estéticas.
  • Rejuvenecimiento de la zona vulvo-vaginal. La utilización de láser contribuye a una recuperación de la pared vaginal, incrementando con ello la densidad de las fibras de colágeno. Por otro lado, contribuye a revitalizar el tono, la elasticidad y la turgencia que se han perdido por la bio-estimulación.
  • Incontinencia de la orina. Este problema afecta con especial intensidad una vez se han cumplido los 40 años. Se manifiesta en una pérdida involuntaria de pequeñas cantidades de orina en cualquier acción, ya sea toser, estornudar, reír o efectuar cualquier esfuerzo. Sus principales causas se relacionan con el embarazo, el parto o la menopausia. El láser presenta la ventaja de no requerir cirugía, con las ventajas de cicatrización que ello conlleva.